Por Serena Gordon Reportera de HealthDay
Traducido del inglés:
Lunes, 1 de agosto, 2005
LUNES 1 de agosto (HealthDay News/HispaniCare) -- Hasta una de cada tres chicas adolescentes sexualmente activas podría
haber sido víctima de violencia en sus relaciones de pareja. Y esas mismas chicas también tienen un riesgo significativamente
mayor de contraer enfermedades de transmisión sexual (ETS), incluido el VIH.
Estas perturbadoras conclusiones provienen de un estudio en la edición de agosto de Pediatrics.
"Los adolescentes experimentan terribles tasas de violencia en sus relaciones de pareja", afirmó la autora del estudio
Michele Decker, coordinadora del proyecto de investigación de la Facultad de Salud Pública de Harvard, en Boston. "Las chicas
que han experimentado violencia en relaciones de pareja tienen dos y media veces más probabilidades de ser diagnosticadas
con una ETS".
La Dra. Karen Hopkins, pediatra de la Facultad de Medicina de la Universidad de Nueva York, añadió que: "Me parece sorprendente
que tantas chicas tengan que lidiar con la violencia en sus relaciones de pareja. Sorprendente y triste. ¿Sienten estas chicas
que no tienen alternativas? ¿Esto es mejor que no tener ninguna relación? ¿Piensan que tienen que estar en una relación a
cualquier precio?".
Decker afirmó que los hallazgos del estudio apuntan a la necesidad de trabajar con los chicos adolescentes y dejarles saber
que "la violencia en las relaciones de pareja no es aceptable".
Hopkins concurrió y apuntó que un mensaje sutil que subyace de muchas formas en los medios de comunicación de hoy en día,
tales como los videojuegos y la música popular entre los adolescentes, es que la violencia contra las mujeres es aceptable,
y que los padres tienen que tratar de contrarrestar ese mensaje.
De acuerdo con Decker, investigaciones previas han demostrado que hasta una de cada cinco chicas en la secundaria experimentarán
violencia en sus relaciones de pareja. Dado que las tasas de infección con VIH y otras ETS continúan en aumento entre el grupo
de 15 a 25 años, Decker y sus colegas creyeron que podrían encontrar una asociación entre la violencia en las relaciones de
pareja y las ETS.
Los investigadores entrevistaron a 1,641 chicas adolescentes sexualmente activas de Massachusetts. En el grupo de estudio,
el 75 por ciento de las chicas eran blancas, el 11 por ciento latinas, el 8.4 por ciento negras y el 3 por ciento asiáticas.
Se les preguntó a las chicas si alguna vez habían sido físicamente o sexualmente abusadas por alguien con quien estuvieran
saliendo. También se les preguntó si habían recibido en algún momento una prueba o un diagnóstico de una ETS.
Un tercio de las chicas que habían sido evaluadas para una ETS, incluido el VIH, reportaron haber sido víctimas de violencia
en sus relaciones de pareja. Más de la mitad (el 51.6 por ciento) de las diagnosticadas con una ETS habían experimentado violencia
en las relaciones de pareja, de acuerdo al estudio.
"Este estudio muestra que esto sucede por todo el país. Esto no sólo sucede en las comunidades pobres. Sucede en todos
los grupos raciales y estatus socioeconómicos. Los adolescentes necesitan la supervisión y atención de los adultos", afirmó
Hopkins.
También señaló que si una chica adolescente es diagnosticada con una ETS, cuya información tendrá necesariamente que compartir
con sus padres, sus padres deben tratar de iniciar un diálogo sobre la violencia doméstica en las relaciones de pareja, y
buscar evidencia de violencia en las mismas.
Decker anotó que una de las razones por la que las tasas de ETS podrían ser tan alta entre estas mujeres jóvenes es que
podrían sentirse presionadas a tener actividad sexual, y que podrían sentir que no pueden pedir el uso de un condón.
"Sabemos, por otros trabajos, que los hombres abusivos son frecuentemente parejas sexuales muy arriesgadas", apuntó Decker.
Este estudio apunta a la necesidad de que los padres, profesores y cualquiera que interactúe con adolescentes de forma
regular aprendan sobre la violencia doméstica en las relaciones de pareja, agregó Decker.
Tanto Decker como Hopkins dijeron que los padres deben tratar de mantener abiertas las líneas de comunicación con sus adolescentes,
y que los padres de chicos deben también preocuparse por este asunto. Recomiendan a los padres hablar sobre los temas de violencia
doméstica en las relaciones de pareja y las ETS, pero sugirieron que los padres traten de mantener su tono libre de sermones
cuando se trate de la actividad sexual normal.